lunes, 25 de enero de 2010

Matrimonios entre personas del mismo sexo, ¿Es posible? II

La semana pasada el Partido Acción Nacional (PAN) en el Distrito Federal realizó una consulta ciudadana para conocer la opinión de los capitalinos en torno a los matrimonios entre personas del mismo sexo y la posibilidad de que estas uniones adopten niñas y niños.

El pasado 20 de enero el presidente nacional del PAN, Cesar Nava Vázquez dio a conocer los resultados de las dos encuestas levantadas por dos casas encuestadoras serias: GEA-ISA y BGC realizadas en el Distrito Federal. Cabe mencionar que ambas encuestadoras realizaron sus trabajos de manera individual.

Veamos primero los resultados presentados por la empresa BGC:

¿Está usted de acuerdo o no en la celebración de matrimonios entre homosexuales, es decir, entre personas del mismo sexo? El acuerdo o acuerdo en parte dio como resultado en esta encuesta 46 por ciento, el desacuerdo o en desacuerdo en parte 43 por ciento y un 11 por ciento de los capitalinos encuestados se abstuvo o no supo qué contestar.

En el tema de la adopción de niñas y niños por parejas homosexuales: En acuerdo o en acuerdo en parte se pronunció el 19 por ciento, y en desacuerdo o en desacuerdo en parte se pronunció el 71 por ciento de acuerdo a esta encuesta. No sabe o no contestó el 10 por ciento.

Sobre los resultados por la empresa GEA-ISA que veremos a continuación:

¿Está usted de acuerdo o en desacuerdo con la celebración de matrimonios entre parejas homosexuales?. El acuerdo fue del 47 por ciento; en desacuerdo del 46 por ciento; no sabe o no contestó, el 7 por ciento.

Y sobre la pregunta ¿Y está usted de acuerdo o en desacuerdo en la posibilidad de adoptar niñas y niños por parejas homosexuales?. En desacuerdo el 74 por ciento; de acuerdo el 19 por ciento; no sabe o no contestó, el 7 por ciento.

Con estos resultados es claro que en el tema del matrimonio entre personas del mismo sexo, la población del Distrito Federal está dividida, no hay una posición claramente mayoritaria en un sentido ó en otro.

Y en el tema relativo a la adopción de niños por parejas del mismo sexo el rechazo de los capitalinos es categórico. Casi ocho de cada diez habitantes del Distrito Federal se pronuncian en contra de la posibilidad de que las parejas del mismos sexo puedan adoptar niñas o niños.

En mi escrito de la semana pasada dejamos claro que el PAN respeta el pensamiento propio de todos y cada uno de los ciudadanos siempre y cuando no afecten a terceros. Y añadimos que para Acción Nacional no existe sobre estos temas un ánimo discriminatorio hacia las personas con tendencias del mismo sexo.

Ahora bien sobre la aprobación por parte del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y una parte del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) del matrimonio entre personas del mismo sexo aclaramos que es un engaño para dichas comunidades ya que esta reforma no les atribuye ningún derecho.

Desde mi punto de vista personal creo de entrada que existen temas muchos más relevantes que colocar este tema en la agenda nacional como lo hizo PRD y parte del PRI, pero ya que se él subió tema mediáticamente considero a reserva de análisis jurídico profundo de los especialistas en derecho, que lo ideal para que las parejas de mismo sexo puedan concretar su unión libre tendría que elaborase una ley que riga la unión entre personas del mismo sexo y evitar la modificación a un sin número de leyes. Pero antes de todo lo anterior, requerimos discutir públicamente el tema por ser un tema contranatura.

Nuevamente lo decimos que en este tema lo que está de fondo no es un asunto de ideologías de izquierda o de derecha, como se ha mencionado. El Presidente Nacional del PAN, Cesar Nava ha sido contundente “no es un asunto de moral o de religión; lo que está de fondo, lo queremos reiterar, es la defensa de los derechos de los niños”.

Los niños no son un bien a lo que tengamos derecho, los niños tienen derechos propios, son personas sujetos de derechos que deben ser respetados. Y precisamente lo que se ignoró en estas reformas en la ALDF fue atender a la defensa de los derechos de los niños.

Y concluyo con esta frase: El núcleo familiar es la base fundamental de la sociedad.